No somos adivinos, por ello no tenemos ni idea del futuro de las vías pecuarias, pero sí sabemos que hay esperanza para mejorar su estado y recuperar su uso.
Si la sociedad en su conjunto apoyamos a las/os ganaderas/os trashumantes (pastoras, pastores y sus familias), se ayudará a evitar el abandono rural y la despoblación, contribuyendo a mitigar la masificación urbana.
La mayor concienciación por la salud y la importancia de la calidad ambiental para conseguirla, pone a gran parte de la sociedad a favor de que los gobiernos financien la restauración ecológica. Por eso, la recuperación de una ganadería trashumante que incorpore las adaptaciones tecnológicas y científicas modernas significa una increíble oportunidad frente a los desafíos* a modo de solución basada en la naturaleza:
Además, algo que puede ayudar a sensibilizar, concienciar y conservar las vías pecuarias es tener en cuenta los servicios de los ecosistemas que aporta la trashumancia para la conservación de la naturaleza. Muchas más personas se concienciarán y colaborarán cuando conozcan los beneficios, ambientales y para el bienestar de las personas que supone recuperar sistemas más sostenibles como son la trashumancia y la ganadería extensiva. Estos beneficios y funciones de la trashumancia son todavía más importantes en España, porque España es el país europeo donde las tierras con grandes contrastes ambientales a lo largo del año son más extensas.